La mañana del 2 de agosto de 2018 muchos nos enterábamos de una triste noticia. El abandono y la desidia del gobierno de la provincia de la Buenos Aires, nos arrebataba dos trabajadores de la educación en el vecino Municipio de Moreno.
Por Daiana Toloza
Sandra Calamano era Vicedirectora y Rubén Rodriguez auxiliar, ambos de la Escuela Primaria Nº 49 de Moreno. Como todas las mañanas, preocupados por otorgarle el desayuno a los estudiantes del establecimiento, que era cada vez más demandado por la crisis socioeconómica de nuestro país, ellos llegaron un rato antes y se dispusieron a realizar esta tarea destinada a asistir una necesidad tan primordial para la escolarización de los chicos, ya que todos somos conscientes que con los estómagos vacíos no se puede estudiar. Si bien todos aspiramos a que la escuela sea un espacio de transformación social para el desarrollo del conocimiento en post del aprendizaje, y esperamos que llegue el día en que todos los niños y adolescentes lleguen a las aulas con el objetivo exclusivo de esta tarea, la realidad desde hace mucho es completamente distinta y los docentes no podemos ser ajenos a la realidad social de nuestros estudiantes y de nosotros mismos.
Por Daiana Toloza

Así lo entendían Sandra y Rubén, quienes ingresaban incluso antes de su horario de trabajo para asistir a los 500 chicos de la EP n°49, y hasta los días sábados, donde Sandra había comenzado el programa de puertas abiertas esos días. Donde los chicos iban a hacer de todo, les enseñaban a cocinar, teatro y otras actividades. Por su parte, Rubén había asistido de niño a la misma escuela, y luego fue auxiliar durante 15 años. Un claro ejemplo de sentido de pertenencia que se generan por las escuelas barriales en las que trabajamos gran parte de la comunidad educativa.
La escuela no contaba con red de Gas Natural, sino que como tantas otras en el conurbano bonaerense, era suministrada por garrafa. Las autoridades de la escuela ya habían realizado ocho reclamos al área de infraestructura escolar bonaerense respecto a la conexión de gas, causante de la explosión de la garrafa ese fatídico 2 de agosto.
Cabe recordar que en ese periodo las escuelas de la provincia de Buenos Aires estaban atravesando un proceso de vaciamiento y desinversión, que agudizó mucho más los problemas de infraestructura que la misma atraviesa por lo menos desde los ’90. Cuando asumió María Eugenia Vidal el porcentaje del Presupuesto bonaerense destinado a Educación era del 28%, al dejar su mando el porcentaje descendiò a 24%, que fue el màs bajo de los ùltimos 26 años.
Esta desinversión, se vio con mayor claridad en los municipios gobernados por los intendentes peronistas de la línea más opositora a Cambiemos. Por caso, en La Matanza, fue la actual Vicegobernadora y por entonces Intendenta Verónica Magario quien tomò la desiciòn en 2018 de invertir $900 millones en infraestructura contando solo con $275 millones que fueron enviados de provincia, es decir la inversion municipal triplico el presupuesto otorgado por provincia en concepto de Fondo Educativo. Este dinero fue destinado a refaccionar o ampliar 200 establecimientos educativos en nuestro territorio, incluyendo jardines, primarias, secundarias y hasta la construcciòn de 6 nuevas aulas en un Instituto de Formación Docente en Ramos Mejía.
Durante el macrismo, el trabajo docente fue desprestigiado de distintas formas. No solo económicamente, por ejemplo eliminando la paritaria nacional docente (derecho adquirido durante el kirchenrismo), sino tambièn de forma simbólica a través de los medios de comunicación acusando a los docentes de “vagos” o de “no querer trabajar”, cuando estos demuestran dìa a dìa su compromiso social con el rol transformador de la escuela. Dicho rol, ha quedado demostrado en supremacía durante este 2020 atravesado por la pandemia màs grande de los ultimos tiempos, donde vemos diariamente y en todos los rincones del país el trabajo incansable y arriesgado que realizan entregando modulos alimenticios, trabajado sin limite horario a través de los dispositivos que ellos mismos ponen a disposición. Además de compañar a los estudiantes y a las familias a transitar de la mejor manera posible este periodo de angustiada y desconcierto.
La reivindicación al trabajo docente solo puede venir de la mano de una transformación política que abarque las condiciones laborales tanto de infraestrucutra como en una justa remuneración.¡Es la lucha el legado que nos dejaron los compañeros Sandra y Rubén!*INTEGRANTE DEL FRENTE DE EDUACIÓN POPULAR
1 Comentarios
Muy interesante e importante homenajear su lucha!!!
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