Todos ponen (II)

El Presidente AF anticipó que el plazo de negociación de la deuda con los bonistas, se prorrogará al menos 10 días de la fecha fijada para el 12 de junio, para hacer posible un acuerdo de partes donde se acepte la oferta de canje y se evite el default.

El Presidente Alberto Fernandez anticipó, en una entrevista con Radio 10, que el plazo que se había fijado como límite para la negociación con los bonistas privados se extenderá más allá de este viernes, manifestando que:
probablemente será extendido al menos 10 días o más. Por ahora no sabemos. Estamos en una negociación
 poniendo el acento en que el gobierno está haciendo los mayores esfuerzos para arribar a un acuerdo sostenible sobre los 65.000 millones de dólares de deuda soberana en manos privadas. AF manifestó que Argentina hace años está atravesando una crisis económica y necesita llegar a un entendimiento con los acreedores privados, aunque esta tarea demande más tiempo. A modo de ejemplo, AF recordó que las negociaciones de reestructuración de la deuda previa en 2005, cuando él era Jefe de Gabinete, duraron todo un año. El primer mandatario enfatizó que 
está claro que la Argentina debe encontrar un acuerdo con los acreedores, está claro que los acreedores no aceptaron nuestra oferta, está claro que la Argentina va a mejorar su oferta, que no va a poner en riesgo la sostenibilidad de la economía argentina”.
Este miércoles AF se reunió con el ministro de Economía Martin Guzmán para examinar la nueva propuesta que remitirán esta semana a la Comisión de Bolsa y Valores de EEUU (SEC). A ese efecto, en los últimos días se firmaron con los grupos de acreedores, nuevos acuerdos de confidencialidad (non-disclosure agreement o NDA su sigla en inglés), para poder negociar los detalles de la nueva propuesta bajo un “paraguas” que permita llegar a un entendimiento. Desde el gobierno se dejó trascender que, la nueva oferta podría contener “endulzantes” que la harían más atractiva a los bonistas, como el compromiso de realizar un pago de 500 millones de dólares en 2021. Según trascendidos, la mejora de la oferta podría complementarse con la aplicación de una especie de Value Recovery Instrument (VRI) asociado a las exportaciones agropecuarias, que tomaría como referencia el promedio de las ventas externas de este sector de cinco años. Este instrumento permitiría realizar mayores desembolsos, en tanto crezcan las exportaciones, sin afectar la sostenibilidad de deuda, lográndose una mejora en el valor presente neto (VPN) de los nuevos bonos del orden de 3 dólares en la oferta argentina. A esto se le agrega el planteo de minimizar la quita del capital y adelantar el pago de intereses. En suma, el Gobierno se estaría acercando a una cifra mas atractiva, VPN de 50 dólares (por cada lámina de 100 y tomando una tasa de descuento de 10 %), para las aspiraciones de los bonistas más accesibles, quienes propusieron un VPN de 53 dólares. Los fondos de inversiones mas proclives a conciliar con el gobierno, como el Comité de Acreedores de Argentina (ACC), integrado por Gramercy, Fintech y Greylock, entre otros, estaría cerca de acordar, mientras, el grupo Ad Hoc Bondholder Group, que integra BlackRock, entre otros, mantendría hasta el momento una posición más intransigente. Resulta una tarea ardua para el Gobierno la reestructuración de la deuda de bonistas privados, debido a que comprende bonos emitidos durante el gobierno de Néstor -llamados bonos K- como también otros bonos M que corresponden a la presidencia de Macri, que cuenta con cláusulas legales distintas que dificulta concretar un canje con los tenedores. Para los títulos emitidos durante la gestión Kirchner (bonos K) se necesita lograr, por lo menos, un consenso del 75 % de los acreedores, mientras los bonos de la era Macri (bonos M) demandan el 65 % de adhesión. Esto se debe a que los bonos K ya fueron reestructurados en su momento, y ahora las circunstancias “a tiro de default” que nos dejó el gobierno de Cambiemos, obliga a que se los tenga que volver a renegociar. Fuentes del Palacio de Hacienda indican que “la negociación está encaminada”, y sostienen que el presidente AF podría hacer anuncios a corto plazo, se especula que podría redactarse un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) con la oferta original “enmendada” con la ampliación del plazo de negociación por 10 días, a partir del vencimiento establecido para este viernes. Por otra parte, y en relación con la deuda que el país tiene con el FMI, el ministro de Economía Martin Guzman, ha manifestado a un medio brasileño (diario económico “Valor”) que: “…la Argentina no tiene como pagar al FMI” y plantea la intención del Gobierno de buscar un acuerdo con el organismo indicando que
 “vamos a tener que negociar un nuevo programa con el FMI. Lo que buscaremos es no tener que hacer ningún pago de capital al Fondo por los próximos 3 años. Simplemente porque la Argentina no tiene capacidad para pagar a los acreedores privados y tampoco al Fondo.”.
 El ministro de economía Martin Guzmán dijo que una vez resuelta la renegociación con los acreedores privados, las prioridades del Gobierno serán atender la crisis generada por la pandemia del coronavirus, para lo cual buscará fortalecer el mercado de capitales doméstico, en pesos, frente a la falta de financiamiento externo, reducir el déficit fiscal y aumentar las reservas internacionales del Banco Central. Por lo pronto, la percepción del mercado es positiva en relación a las posibilidades de un acuerdo, ya que ambos lados han cedido cerca de 10 puntos para avanzar con las negociaciones. Esto se reflejó en el precio de los bonos, cuando este miércoles los títulos en moneda extranjera, entre ellos el Bonar 2024 subió un 4,5 %, mientras el riesgo país registró una baja de 74 unidades, cerrando la jornada en 2523 puntos.

*Abogado UM.

Publicar un comentario

0 Comentarios